Jaguar Negro

viernes, 27 de diciembre de 2013

Lo Básico: Lentes Zoom o Fijos

Sobre lentes fotográficos se puede escribir mucho.

Los lentes, o llamados de la manera correcta como objetivos, son los elementos más versátiles y diversos en las cámaras digitales Reflex, tanto profesionales como semiprofesionales e incluso en las nuevas compactas con objetivos intercambiables. 



Existen muchos objetivos diferentes que pueden clasificarse según la distancia focal, la apertura o que cuentan o no con elementos electrónicos accesorios como sensores de autoenfoque, de reducción de movimiento, etc. Igualmente, existen muchas compañías, no solo las que fabrican cámaras, que se han especializado únicamente en producir y perfeccionarlos.

Uno de los elementos a considerar al adquirir un objetivo es la distancia focal: esta puede ser fija o variable.




Los objetivos de distancia focal variable, llamados también objetivos "zoom", tienen la facultad de abarcar un rango de distancias focales. Usualmente se les identifica con la distancia mínima y máxima (ejemplo: 18-55mm). Estos lentes nos permiten tomar fotografías sin necesidad de alejarnos o acercarnos para encuadrar a nuestro sujeto/objeto. Igualmente, nos permiten tomar fotografías tanto de paisajes como de objetos a largas distancias, en vez de adquirir objetivos específicos para estas distancias focales. 

Lente Canon de distancia focal variable (28-200mm)


Sin embargo, estos objetivos tienen una clara desventaja frente a los objetivos fijos: están límitados en el paso de la luz y en la calidad de la imagen. Al ser objetivos variables, estos cuentan con mayor numero de elementos ópticos (lentes) en su interior, que les permite desempeñar la función de zoom. Al tener más elementos, también distorsionan en mayor medida la imagen que se desea captar. Igualmente, al tener mas componentes en su interior, se limita la capacidad del objetivo para tener mayor apertura; es decir, mayor paso de luz.

Elementos ópticos de un objetivo de distancia focal variable

De esta forma, los objetivos fijos proporcionan una mejor calidad de imagen por que, al tener menos elementos, la imagen no sufre tantas alteraciones ópticas. Aunque los objetivos fijos suelen tener un mayor peso al estar fabricados con aleaciones metálicas, también son más resistentes.

Lente Nikon de distancia focal fija (50mm)


Los objetivos fijos suelen usarse en estudios fotográficos, para fotografía de paisajes o situaciones muy específicas donde se requiera que la imagen que se tome sea de una calidad excepcional. En fotografía de naturaleza, los objetivos variables suelen ser los más usados, ya que se dificulta el intercambio de objetivos en el campo, ademas de que un objetivo zoom facilita el encuadre adecuado si el sujeto está en movimiento, como suele suceder cuando se toman fotografías de animales silvestres. 

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